La resistencia a la insulina es el primer paso de una posible diabetes tipo dos pero, ¿sabías que es reversible? En este artículo te hablamos sobre ello.
Antes de tener un diagnóstico de diabetes tipo 2, son muchos los cambios que empiezan a ocurrir dentro del cuerpo sin apenas darnos cuenta. La resistencia a la insulina es el primero de ellos. ¿Acabas de saber que tienes resistencia a la insulina? No te preocupes. En este artículo te explicamos todo lo que deberías saber para comprender qué ocurre en tu cuerpo.
¿Qué es la resistencia a la insulina?
Cuando te diagnostican resistencia a la insulina significa que algo ha cambiado en tu cuerpo. No pienses que es el fin del mundo, el páncreas todavía produce insulina. Pero esta está comenzando a tener problemas para absorber la glucosa de la sangre, así que no puede hacer su trabajo.
El páncreas trata de solucionar esta situación. Y, para ello, produce mayor cantidad de la hormona que se encarga de gestionar los niveles de azúcar en sangre. Gracias a esto, el cuerpo sigue funcionando bien.
Esta condición es el primer paso de una posible diabetes tipo 2. Pero no te asustes. Es reversible casi el 100% de las veces. ¿Cómo? Detectándola a tiempo y esforzándose por tratarla. Cambiar tu estilo de vida a uno más saludable, mejorar tu alimentación o hacer deporte podrán serte de ayuda para parar su desarrollo.
Síntomas de la resistencia a la insulina
¿Sabías que cuando se empieza a desarrollar la resistencia a la insulina no hay síntomas? Como se ha mencionado antes, el cuerpo trata de solucionar la falta de insulina. Para ello produce más de esta hormona. Esto, funciona durante un tiempo, pero no para siempre.
Cuando el páncreas ya no puede producir más empiezan a aumentar los niveles de azúcar en sangre. Ahí es cuando aparecen los primeros síntomas:
- Más sensación de hambre y también de sed.
- Mayor necesidad de orinar.
- Hormigueo en las manos y los pies.
- Sensación de cansancio.
- Niveles altos de colesterol.
- Subida de peso.
- Trastornos cardiovasculares como la hipertensión.
¿Se puede prevenir la resistencia a la insulina?
A día de hoy no se sabe por qué ocurre la resistencia a la insulina. Sin embargo, hay algunos factores que pueden influir en que aparezca esta condición.
- Factores genéticos: Si tienes antecedentes familiares es mucho más probable que desarrolles resistencia a la insulina.
- Sexo: Hay más casos de esta condición entre hombres que entre mujeres.
- Peso: El sobrepeso o la obesidad hacen más difícil que el cuerpo produzca y gestione la insulina.
- Sedentarismo: Como con el peso, el sedentarismo afecta mucho a la absorción del azúcar en sangre. Para evitarlo, es recomendable hacer 30 minutos de ejercicio diario.
- Dieta: Una dieta desequilibrada puede hacer que produzcas menos insulina o que tengas resistencia a ella.
- Algunos fármacos: Medicamentos como la cortisona o los corticoides pueden hacer que tu cuerpo sea más resistente a la insulina.
- Presión arterial alta: La presión arterial alta también puede estar vinculada con mayores posibilidades de tener esta condición.
Aun teniendo alguno de estos factores, la resistencia a la insulina se puede prevenir o disminuir. ¿Cómo? Teniendo un estilo de vida saludable, haciendo deporte y comiendo variado.
3 consejos para evitar que se agrave la resistencia a la insulina
En este apartado te vamos a dejar 3 actividades básicas si lo que quieres es disminuir tu resistencia a la insulina.
Aumenta el deporte en tu vida diaria
La falta de deporte puede hacer que su páncreas no funcione bien. Eso se traduce en que puede que no produzca la insulina que debería. Aumentar la cantidad de deporte que haces te ayudará a estar en forma y, además, a que tu organismo funcione a la perfección.
Pierde peso
La obesidad o el sobrepeso son dos de los factores que más terminan derivando en resistencia a la insulina. Por eso, si te encuentras por encima de tu peso ideal, lo recomendable sería que bajases un poco. Si estás en el correcto, solo debes mantenerte. Esto hará más sencillo el trabajo de tu páncreas.
Lleva una dieta equilibrada
La dieta juega un papel muy importante en el desarrollo de la resistencia a la insulina. Además, también influye en otros factores como el peso y la glucemia.
En tu dieta deben ser muy importante las frutas y verduras. Otros elementos que también deberían estar muy presentes son las nueces o el aceite de oliva. Trata también de eliminar las grasas saturadas y vacías. Por ejemplo, la bollería industrial. Y evita cocinar con demasiado aceite y exceso de sal.
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